Muchas personas, en especial las mujeres, adquieren productos de belleza o cosméticos pero no siempre tienen la precaución de darle la higiene adecuada a su piel. Y por no tener los cuidados necesarios ésta se maltrata más de lo normal. Además, diariamente la piel está expuesta a diferentes agresiones como la contaminación, el viento, los rayos del sol, entre otros. Y al estar siempre descubierta, la piel del rostro es más vulnerable, por lo que nuestra piel necesita de un cuidado adecuado.
Por otra parte, nuestra piel es el órgano que recubre toda la superficie corporal incluyendo los orificios de las mucosas y una piel sana es aquella que está libre de procesos patológicos. Y la clasificación es muy útil a la hora de poder recomendar cremas o algún tratamiento.
Seca
Presentan una mayor pérdida de agua transdérmica o incapacidad de retenerla, ya sea por el envejecimiento o por la agresión externa o genética. Además presentar ausencia de grasa.
Son pieles finas, tensas y estiradas, reactivas a estímulos externos, con tendencia a presentar eritema, prurito, descamación y sensación de tirantez.
Normal/mixta
En aquellos casos en los que tiene lugar un ligero aumento de la secreción sebácea. Son pieles cuyo estado varía a lo largo del mes con la fluencia hormonal, el estrés o el clima. Presentan un aumento del tamaño del poro y, en ocasiones, comedones o puntos negros de forma localizada.
El ejemplo más característico es la coexistencia de piel seborreica en la zona central de la cara (zona T) y piel seca en mejillas.
Sensible
Es una piel más fina pues reacciona con facilidad y rapidez ante cualquier agresión ambiental (frío, calor, aire acondicionado). Con frecuencia conlleva reactividad a cosméticos potentes, y con el paso del tiempo, es fácil observar pequeñas dilataciones de venitas de superficie. En ocasiones, estos pacientes presentan rosácea que podría ser tratada por su dermatólogo.
Cada día, más mujeres declaran tener piel sensible. Esto se debe principalmente a que en la sociedad moderna, existen muchos agentes que aumentan o desencadenan dicha sensibilidad, tales como el aire acondicionado, la mala alimentación, el estrés, el tabaco y la contaminación ambiental.
Cuidados del rostro
- En el caso de quienes tienen una piel normal/grasa es recomendable lavar la cara con algún jabón suave para la piel o leche desmaquilladora, para luego terminar con una loción micelar. Mientras que para las pieles secas es mejor evitar el uso de jabones.
- Utilizar una crema específicamente para el rostro, de preferencia con protector solar. O utilizar un protector solar en textura de gel para pieles mixtas y de crema o crema-gel para las pieles normales.
- Mantener una dieta equilibrada con una alta ingesta de agua, en especial para las pieles secas, sin carencias proteicas ni vitamínicas.
- El uso de cosméticos hidratantes destinados a favorecer y mantener la hidratación de la piel y el equilibrio del manto hidrolipídico.
Si bien es importante, para mantener una piel saludable no basta solo con la higiene. Ésta debe acompañarse de una serie de medidas generales y un determinado estilo de vida.
Fuentes.
http://www.dermoesencia.com.ar/PDF/2010/junio.pdf
http://www.infosalus.com/estetica/noticia-tipos-piel-cuidados-especificos-20180216083635.html
Diana
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Alfonso Martínez
Naturista y fitoterapeuta
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