En la actualidad los contaminantes están omnipresentes en nuestro medio ambiente, la exposición constante a estas sustancias ha sido asociada a numerosas enfermedades. Aun cuando nos cuidemos mucho, recogemos y acumulamos en nuestro cuerpo muchas toxinas que nos pueden enfermar. En circunstancias normales, nuestro organismo cuenta con los nutrientes necesarios para eliminar las sustancias contaminantes y protegerse de los efectos perjudiciales que causan las mismas sustancias contaminantes.
¿Qué pasa cuando el cuerpo se intoxica?
En el organismo casi no hay un órgano, tejido o elementos de función que no estén dañados o interferidos por la acidez, que no se haya podido mejorar con las desintoxicaciones. El equilibrio de nuestra salud depende en gran medida del buen funcionamiento de los órganos de eliminación. Pero a partir del momento en que absorbemos un exceso de toxinas a través del agua, del aire o de los alimentos que ingerimos, saturamos los procesos de eliminación e intoxicamos nuestro organismo y alterando los diferentes procesos normales del organismo. Y aparecen síntomas como:
- Fatiga.
- Trastornos del sueño.
- Trastornos gastrointestinales.
- Dolores de cabeza.
- Reacciones adversas a alimentos, perfumes, jabones, detergentes, entre otros.
- Alergias ambientales.
- Confusión.
- Ansiedad.
La desintoxicación es importante, ya que el organismo necesita eliminar las toxinas que en la mayoría de los casos alteran el equilibrio funcional del individuo y su estado de salud. Muchas de estas toxinas son acumuladas durante años en nuestro organismo originando una serie de enfermedades.
¿Cómo es el proceso de desintoxicación?
El cuerpo tiene sus propios mecanismos de desintoxicación como el hígado, riñones, la piel, el sistema de la circulación sanguínea, el filtrado glomerular, los procesos enzimáticos, respiración-expiración y muchos otros. Pero, ¿cómo hace el organismo para eliminar las toxinas? Ciertas sustancias potencialmente peligrosas o indeseadas son fácilmente eliminadas por las heces, orina y sudor, pero otras deben ser transformadas y neutralizadas por el hígado antes de der eliminadas.
Para transformar y neutralizar las toxinas, el hígado ha desarrollado un sistema de desintoxicación que consiste en 2 fases principales y una fase intermediaria. Mediante esta cadena de procesos. El hígado convierte las toxinas en sustancias más “dóciles” y más solubles en agua, para que estas puedan ser transportadas a través de los canales biliares hasta el intestino para finalmente ser eliminadas.
Recomendaciones para la desintoxicación
Sin embargo, la alimentación adecuada es suficiente para ayudar con la desintoxicación. Los alimentos procedentes de la naturaleza madre como las frutas, verduras, hortalizas, cereales y legumbres, son alimentos que exigen un menor trabajo digestivo, además limpian y pulen nuestro organismo. Al ser alimentos ricos en fibras, aseguran una mayor limpieza del tubo digestivo.
También el ejercicio es un elemento fundamental dentro de cualquier programa de desintoxicación. El ejercicio aumenta la circulación linfática, lo que ayuda a transportar las toxinas hacia los órganos de desintoxicación. El organismo almacena muchas toxinas en el tejido graso. Cuando haces ejercicio, liberas las toxinas que están almacenadas en la grasa que estas quemando. Puedes trotar, nadar, pedalear, etc. Esto incrementa temporalmente los niveles de toxinas en tu sangre y el transporte de estas a tu hígado para su respectiva transformación y eliminación.
Por lo tanto, la desintoxicación de nuestro cuerpo es muy importante.
Fuentes.
http://lorenaalvarezgonzalez.com/pdf/como-desintoxicar-tu-cuerpo.pdf
http://verdadpresente.com.ar/publicaciones/descargas/desintoxica/DesintoxicatuCuerpo.pdf
http://www.casinoexpress.cl/boletines/Por%20que%20es%20necesaria%20la%20desintoxicacion%20del%20cuerpo.pdf
Diana
Equipo de redacción
Alfonso Martínez
Naturista y fitoterapeuta
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