La Vitamina E excelente para la piel

Todas mujeres o al menos la mayoría quisieran tener una piel radiante, pues el seguir una dieta sana además de beneficiar tu salud, también beneficiará tu piel y la vitamina E o tocoferol es un nutriente liposoluble en muchos alimentos. Actúa como antioxidante, al ayudar a proteger las células de los radicales libres (compuestos que se forman cuando el cuerpo convierte los alimentos que consumimos en energía).

La vitamina E se encuentra naturalmente en alimentos como nueces, semillas y vegetales de hojas verdes. Aumentado el consumo de frutas, verduras y cereales integrales, fuente de antioxidantes, combate los radicales libres. Aumentado la riqueza de sus vitaminas, favoreciendo la hidratación y la salud de la piel.  Además de las frutas y verduras frescas, es aconsejable consumir frutos secos. Una ración diaria, no muy grande, es suficiente ya que aportan muchas calorías. Siendo ricos en vitamina E, igual que los vegetales de hoja verde y las frambuesas.

Los frutos secos como las almendras, nueces o pistachos, junto a las verduras y fruta, consiguen reducir la oxidación celular, el envejecimiento de la piel, a la que proporcionan elasticidad e incluso pueden ir bien contra las manchas cutáneas. Además, las nueces y las avellanas que son ricas en cobre, actúan como antiinflamatorio, mejorando trastornos cutáneos de este tipo que intervienen en la síntesis de la elastina.

El brócoli contiene buenas concentraciones de magnesio, que contribuye a expulsar los tóxicos del organismo, lo que sin duda se nota en la piel. También posee propiedades antiestrés. El tomate, una hortaliza muy consumida, que aporta un pigmento con cualidades antioxidantes: el licopeno. Los aceites vegetales, por ejemplo, los aceites de germen de trigo, girasol y cártamo, se encuentran entre las fuentes más ricas de vitamina E. Los aceites de maíz y soja también aportan vitamina E.

Otra variedad recomendable para mantener una piel bella y luminosa que no precisamente destaca en vitamina E, es el plátano. Se trata de una fruta rica en zinc, un microelemento antioxidante que mejora la renovación de las células cutáneas y que además las tonifica.

La deficiencia de vitamina E es muy poco común en las personas, pero puede causar daños a los nervios y los músculos con pérdida de sensibilidad en los brazos y las piernas, pérdida de control de movimiento corporal, debilidad muscular y problemas de la visión. Otro signo de deficiencia es el debilitamiento del sistema inmunitario.

Referencia. https://ods.od.nih.gov/pdf/factsheets/VitaminE-DatosEnEspanol.pdf

 

Diana
Equipo de redacción
Alfonso Martínez
Naturista y fitoterapeuta

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