Las enfermedades cardiovasculares son una de las causas más importantes de discapacidad y muerte prematura en todo el mundo. Las enfermedades cardiovasculares son aquellas que afectan al corazón y a los vasos sanguíneos (arterias y venas), provocando obstrucción en ellas y como consecuencia la lesión de órganos que necesitan riego sanguíneo.

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El origen fundamental de la enfermedad cardiovascular es la aparición de placas de ateroma en lo vasos sanguíneos, llamado ateromatosis. Estas placas son depósitos de grasa que se depositan en la pared de las arterias. La presencia de ateromatosis en la pared de las arterías no da ningún tipo de síntoma hasta que obstruyen el paso de la sangre y producen la lesión en alguna parte del cuerpo, como ictus cerebral, infarto cardiaco o claudicación de las piernas.

Un estilo de vida inadecuado como fumar, llevar una vida sedentaria, obesidad, una dieta rica en grasas y proteínas, el exceso consumo de sal y de alcohol, son factores de riesgo. Pero también existen otros factores: los factores de riesgo tratables o que pueden cambiar, como tensión arterial elevada, colesterol elevado, triglicéridos altos, glucosa elevada e insuficiencia renal; y los factores de riesgo que no pueden modificarse como, antecedentes familiares, menopausia precoz y la edad.

Recomendaciones saludables

Para la prevención de las enfermedades cardiovasculares, puede ser a través de la adopción de hábitos de vida saludable.

  1. Una dieta saludable. La dieta mediterránea es ideal, este tipo de dieta ayuda a controlar la obesidad y a reducir el colesterol, el azúcar y la tensión arterial. Todo ello ayuda a que las arterias se mantengan en buen estado y funcionen mejor. Resultado de imagen para cardiovascular disease nutrition
  2. Llevar una vida activa. El ejercicio físico es de gran beneficio para la salud, ya que contribuye a fortalecer la musculatura cardiaca, mejora la resistencia ante el esfuerzo, ayuda a controlar los niveles de glucosa en la sangre, aumenta la concentración de colesterol HDL (bueno), reduce los niveles de estrés y estabiliza la tensión arterial. Cualquier ejercicio que se realiza es mejor que nada, comenzando con 30 minutos de actividad física.
  3. Evitar hábitos nocivos como el tabaco. Dejar de fumar es la más efectiva para que una persona reduzca el riesgo cardiovascular y en consecuencia, mejorar su salud.
  4. Mantener un peso adecuado. Una buena alimentación y el ejercicio son perfectos. Si una persona tiene sobrepeso u obesidad y logra reducir su peso en un 10%, la probabilidad de presentar una enfermedad cardiovascular grave se reduce en torno al 20% en los próximos años.

Estos son aspectos básicos en la prevención de las enfermedades cardiovasculares.

Fuentes.
http://www.osakidetza.euskadi.eus/contenidos/informacion/osapa_insuficiencia_cardiaca/es_infode/adjuntos/Enfermedad%20cardiovascular%20y%2010%20consejos%20para%20prevenir%20la%20arteriosclerosis.pdf

http://www.castillalamancha.es/sites/default/files/documentos/20120511/cardio_int.pdf

 

Diana
Equipo de redacción
Alfonso Martínez
Naturista y fitoterapeuta

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