Arándanos o antibióticos

¿Qué mujer no ha experimentado alguna vez las típicas molestias de una infección urinaria? Se estima que una de cada dos mujeres será víctima de una cistitis a lo largo de su vida. Por tanto, no hay que analizar los dolores que provocan ni el hecho de que suelen ser recurrentes.

Hay que distinguir entre la cistitis repetitiva (menos de cuatro por año) y la recurrente (más de cuatro por año). Si la frecuencia es excesiva, la infección puede alterar la calidad de vida de quien la padece. En estos casos existen varias medidas saludables que pueden tomarse:

  • Adoptar hábitos higiénico-dietéticos
  • Beber mucho líquido, entorno a dos litros y medio por día
  • Orinar cada tres horas
  • Utilizar ropa suelta y ropa interior de algodón
  • Reducir el estreñimiento mediante una dieta rica en fibras.

Más allá de estas medidas, se recomienda tomar zumo de arándano durante las comidas. Su consumo regular ofrece una buena protección contras las bacterias resistentes a los antibióticos. Los arándanos contienen flavonoides y otras propiedades que serían capaces de pegarse a algunas bacterias Escherichia coli, responsables de las cistitis. Como resultado, estas bacterias se verían imposibilidades de adherirse a las células de la vejiga y de causar infecciones. Al no poder anclarse, se eliminan por las vías naturales. Pero en materia de prevención, ¿son los arándanos tan efectivos como los antibióticos?

Antibióticos o arándanos

Muchos estudios han permitido afirmar que los arándanos reducen la frecuencia de las cistitis en las mujeres de entre 30 y 40 años. Pero pasados los 50, resultaba imposible constatar las virtudes de estos frutos. Para saber más, un equipo escocés comparó la efectividad de los arándanos con la del tratamiento antibiótico suministrado en pequeñas dosis preventivas a largo plazo. Participaron en el estudio 137 mujeres de más de 45 años y con más de dos infecciones urinarias en el curso del año anterior. Un grupo tomó 500 miligramos de extracto de arándano durante seis meses y el otro 100 miligramos de trimetropina (antibiótico eficaz contra los gérmenes vinculados a estas infecciones) durante el mismo periodo. Durante el estudio, 39 mujeres padecieron cistitis (25 pertenecientes al grupo de los arándanos y 14 pertenecientes al del antibiótico), con plazos de recurrencia sensiblemente similares (84,5 y 91 días, respectivamente). Las mujeres que más abandonaron el estudio fueron las que estaban bajo tratamiento con antibióticos (11 contra 6 del grupo de los arándanos). En ambos grupos las bacterias implicadas fueron las Escherichia coli. Según los responsables del estudio, en términos de efectividad los antibióticos tienen una ligera ventaja por sobre el extracto de arándano, pero tienen más efectos secundarios.

Además de ser natural y de costar menos, el arándano reduce la probabilidad de reaparición de las bacterias resistentes a los antibióticos y carece de los efectos secundarios de los antibióticos, tales como la infección fúngica intestinal o vaginal (micosis) o la rara pero temible colitis pseudomembranosa producida por la bacteria Clostridium difficile, que inflama el colon y produce diarrea.

 

Diana
Equipo de redacción
Alfonso Martínez
Naturista y fitoterapeuta

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