La pasiflora (Passiflora incarnata) ha sido una de las plantas más utilizadas para combatir el insomnio y reducir el estrés y ansiedad debido a sus propiedades tranquilizantes y ansiolíticas. Además de contar con ello, la pasiflora es espasmolítica y antitusiva.
En la planta se encuentran una serie de flavonoides y alcaloides que actúan en los trastornos del sueño. De acuerdo con la Agencia Europea del Medicamento (EMA) se basa en el uso tradicional para aliviar los síntomas leves de estrés mental y para conciliar el sueño. Según ESCOP, está indicado en casos de intranquilidad, inquietud e irritabilidad con dificultad para conciliar el sueño.
Así como es utilizada para problemas del sistema nervioso, la pasiflora es utilizada en trastornos gastrointestinales relacionados con la ansiedad generalizada y el nerviosismo. También es muy buena para aliviar dolores de cabeza, migrañas, calmar los síntomas de la menopausia asma, trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH), tensión muscular, contracturas musculares y a regular la presión arterial.
Su forma de consumo más común es en forma de infusión, se recomienda 1-2 g de la droga pulverizada en 150 ml de agua hirviendo y tomar de 1 a 4 veces al día. O a través de su extracto líquido.
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Alfonso Martínez
Naturista y fitoterapeuta
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