El mayor uso tradicional del gordolobo (Gnaphalium oxyphillum) es como antitusivo y antiinflamatorio. Las flores de gordolobo presentan actividad antiviral y expectorante, por lo que es excelente para afecciones respiratorias como resfriados, gripes, amigdalitis, faringitis, rinitis, bronquitis y asma. ESCOP aprueba su uso tradicional para el tratamiento del resfriado común asociado con tos o irritación faríngea, como demulcente y expectorante suave.

Debido a que también es analgésico, antibacteriano y antifúngico se ha empleado en afecciones gastrointestinales (diarrea y cólicos), migrañas, gota, alteraciones del sueño, afecciones renales, heridas, quemaduras, hemorroides y otros muchos procesos que presentan un componente inflamatorio.

Para preparar una infusión de gordolobo será una cucharadita de flores por taza, filtra por un colador, preferentemente de algodón*, después de 10 o 15 minutos. Bebe una taza al día antes de las comidas. Si se aplica de forma externa en forma de lavados, actúa como relajante muscular al igual que contra gramos e infecciones de la piel.

*Es importante colar la infusión con un lienzo fino, ya que los estambres pueden producir tos por irritación de la faringe.

Fuentes:
https://botplusweb.portalfarma.com/documentos/2017/10/13/119249.pdf

https://www.fitoterapia.net/vademecum/plantas/index.html?planta=157

Equipo de redacción
Alfonso Martínez
Naturista y fitoterapeuta

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