La manzanilla es una planta muy utilizada para remediar dolencias gracias a sus maravillosas propiedades como sedante, carminativo, antiespasmódico, analgésico, antiinflamatorio y antiséptico. Y que frecuentemente es utilizado en forma de té para el insomnio, la gota, la ciática, la indigestión y la diarrea. Esta una planta aromática que ha sido utilizada desde hace siglos con fines medicinales.
Los estudios farmacológicos modernos respaldan su uso tradicional como antiinflamatorio y sedante, y han comprobado que constituye un antiespasmódico eficaz para aliviar cólicos. La infusión de manzanilla, que se toma como té por su agradable sabor, su efecto digestivo y tonificante, sirve también como enjuague para mantener rubio el cabello.
Existen diversas maneras de usar la manzanilla:
- La más común es su infusión (té).
- Se puede usar para baños, limpiar heridas, o en compresas o masajes.
- Los extractos o el aceite esencial de manzanilla se usan en medicamentos naturales y cosméticos. Se les puede usar para preparar aceite de masaje facial o corporal para obtener sus beneficios.
- Es utilizado en forma de vahos para limpiar la cara.
- Se usa en asientos y similares para padecimientos digestivos.
Por otra parte, la manzanilla alemana es especialmente útil en pediatría contra cólicos, dolores de la dentición y convulsiones infantiles. Sin duda, esta planta posee grandes propiedades que hacen de ella una maravilla en cuestión de salud.
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Alfonso Martínez
Naturista y fitoterapeuta
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