¿Hasta donde podemos llegar en la relación medico-paciente?

¿Hasta donde un médico puede interferir en la vida privada de un paciente?

Bueno yo considero que la relación con un paciente tenemos la regla y creamos la flexibilidad, yo tengo pacientes que han llegado a ser  mis amigos y a veces vienen a consulta y nos reímos, nos bromeamos y nunca he considerado eso como una relación inapropiada pues siempre impera el respeto.

Hace unos días había visto a una paciente muy mal, le veía venir y sentía que sus emociones estaban en el limite, debo confesar que llegué a pensar en la posibilidad del suicidio de mi paciente y entonces comencé a pedir una junta con su familia, hermanas, madre, hermano y hasta sobrinas de mi paciente quien padece crisis epilépticas y de quien más o menos conozco la vida familiar y sus conflictos internos; atiendo a varios miembros de la misma familia así que sin pedirlo y sin desearlo conozco sus problemas y sus desencuentros, había insistido en la vida familiar ya que sentí que las hermanas necesitaban ese foro para manifestar sus descontentos familiares, conciliar sus diferencias y de esta forma mejorar las emociones de mi paciente, ¿Creen que hice lo correcto?

¿Hasta donde podemos llegar en la vida del paciente?

Ejercí medicina natural muy joven incluso sin titulo para hacerlo y esto fue desde la década de los 90s, durante los primeros tres años después de terminar estudios atendí pacientes en mi pequeño y humilde consultorio y algo tenía muy claro y era que el medico o tratante no es solo un servidor de la salud sino un ejemplo de ella, el médico debe ser la huella que su paciente pueda seguir con confianza y esto lo he entendiendo siempre.

El paciente viene y trae consigo no solo sus enfermedades y malestares sino sus esperanzas, sus expectativas y sobre todo su confianza y por ello nuestra labor no termina con la receta sino debemos ser vigilantes de nuestras recomendaciones, revisar que el paciente siga con animo las indicaciones, velar por su alimentación y educarle cuando sea necesario, escucharle con atención y darle el ánimo necesario cuando este venga en decadencia, el paciente no espera de su medico una falta porque la verdad es que el paciente ve en el medico una luz, el medico debe llegar a donde sea necesario en protección de la salud de su paciente siempre y cuando cuente con la confianza de es. Llegará el tiempo cuando el médico vuelva a sensibilizar sobre esta realidad y entienda que su papel en al sociedad es mayor que el simple rol de «sabelotodo», que el paciente es precisamente eso y no un cliente, que el dinero es necesario pero también en la necesidad está la medida, podemos llegar hasta el paciente lo necesite pues hemos prometido cuidar la salud y esta promesa va mucho más allá de la receta.

En mi consulta yo conozco todo lo que del paciente sale con confianza, siempre le digo «puede decirme todo lo que considere ayude a su salud, puede confesarse si lo necesita pues yo no soy juez sino un simple oyente que traducirá todo en favor de su salud»  y no es raro que le pida a una madre que salga de mi consulta para hablar con su hija, que diga a una pareja separada reúnanse en mi consultorio pues necesito hablar de la salud de su niña, sepárense en favor de sus hijos a un diabético reunirlo con su familia o incluso que me reúna con un cardiólogo para tratar sobre la salud de su paciente que ahora también es mi paciente, llamar a un padre alcohólico para tratar de convencerle a dejar de tomar, a un hijo drogadicto para tratar la adicción en favor de su madre enferma y así el día de ayer me he reunido con esta familia maravillosa para tratar de mediar en pro del entendimiento y en favor de la salud de mi paciente.

El medico es luz o es mucha oscuridad y la elección siempre es propia.

Alfonso Martínez

Naturista y fitoterapeuta.

Consultas en Monterrey, Guadalajara, Sonora.

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